LAS TECNOLIGAS Y LAS PERSONAS

  • tamaño de fuente disminuir tamaño de fuente aumentar tamaño de fuente
  • Imprimir
  • Email

El escritor chino, Cixin Liu imagina un futuro donde varias de las tecnologías exponenciales que hoy están en la frontera (nanomateriales, realidad virtual) se entrecruzan y dan lugar a una “dinámica de lo impensado’’, como decía el periodista Dante Panzeri respecto al futbol.

Imaginar el impacto de cada una de las tecnologías por separado (inteligencia artificial, internet de las cosas, etc.) parece una tarea posible, al menos en el campo especulativo. Cuando estas fuerzas comiencen a interactuar, el futuro parece más abierto e imprevisible que nunca (Sebastián Campanaro)

Esto generara modelos de negocios que crecerán rápidamente y en forma impensada.

Cuando el cambio se acelera, el status quo y la inmovilidad (muchos de ellos se van afianzando con el tiempo) son cada  vez más costosos.

Hay esquemas mentales de los cuales hay que liberarse para poder acompañar los cambios de manera amable. Esta adaptación implica gasto de energía

La palabra “innovación’’, de tanto uso, ya es un comodity, como paso en su momento con ‘’digital’’.

El gran problema que enfrentan hoy muchas empresas, no es que no sepan que hacer, sino que sus funcionarios, por diversas razones, no lo hacen (Santiago Bilinkis)

El emprendedor Daniel Nofal invento el concepto de “Estrategia de Thelma y Louise”: Las empresas muy acostumbradas a hacer plata de la misma forma, desde hace décadas, cierran fuertes los ojos, ignoran los cambios que están sucediendo, se toman las manos y pisan el acelerador a fondo hacia el precipicio.

Esta estrategia es una de las respuestas corporativas posibles ante la ola acelerada de avances científicos y tecnológicos, que están volviendo obsoletos modelos de negocios tradicionales.

Como la palabra innovación se puso de moda haces unos anos, muchas empresas que encararon procesos superficiales o cosméticos, desgastaron el concepto y se volvió un bumerán: “No disipemos energía por este camino en el que no vimos resultados, volvamos al core, que es lo que paga las cuentas”

El experto en Innovación Gustavo Aguirre dice: Muchas firmas creen que la transformación pasa solo por digitalizar algunos procesos, lanzar una app, y  eluden plantearse la verdadera pregunta: ¿Sigue teniendo sentido mi negocio en este nuevo contexto en el que estamos viviendo?

Pimentel define a este tipo de empresas como innovadores del catch up, aquellos que corren siempre de atrás porque tratan de no perder la carrera contra las propuestas más innovadores, pero que nunca dan un paso adelante.

Nunca fue tan obvia la necesidad de hacer una transformación drástica en las empresas, pero a su vez nunca fue tan difícil salir del status quo, manifiesta Mark Hurd CEO de Oracle.

El escritor Adan Grant explica como el “efecto status quo’’ se profundiza en etapas de cambios, porque las iniciativas muy innovadoras no tienen contra que ser comparadas y, por lo tanto, se descartan más fácilmente.

Está demostrado que las organizaciones castigan más severamente a quien toma decisiones  con efectos negativos, que a aquel que nos las toma. Incluso cuando esa no acción tiene un efecto negativo más alto.

Esto lleva a la proliferación de “Gerentes Flotantes” que transcurren años o décadas en sus cargos gerenciales sonriendo, cumpliendo minuciosamente los rituales corporativos, pero sin tomar una sola decisión de riesgo.

En estructuras de poder atomizado, donde nadie tiene la capacidad de imponer un proceso de cambio verdadero (y no cosmético), y donde casi todos cuentan con derecho a veto, el status quo anida cómodo.

Pimentel suma a este panorama, lo que en economía se conoce como”problema del principal-agente”, donde los incentivos de los gerentes son distintos a los de los accionistas, y esta distancia se agranda cuando los tiempos promedios en el cargo se van achicando.

Esto no sucede cuando el Director General es a su vez dueño de la Empresa.

Según Pimentel, actualmente, el nivel gerencial pertenece a la Generación X (40/45 anos) y nosotros pensamos que partimos del puerto de un mundo con reglas, navegamos por un mar de aguas sin reglas y en algún momento, este panorama se va a volver a estabilizar y vamos a retornar a un mundo con reglas.

 Sin embargo, hay que mentalizarse de que nunca más volveremos a la estabilidad de reglas, y eso es muy difícil de procesar, explica Pimentel.

Entre la inmovilidad y el status quo, y el otro extremo del imperativo a reinventarse todo el tiempo, puede haber un camino intermedio, ese camino donde se interceptan lo posible y lo deseable, que son la Inteligencia Adaptativa.

Según  Héctor Cattena, la Inteligencia Adaptiva es la escusa ideal para los no innovadores, ante propuestas de cambios, responde con un: Ya lo estamos haciendo. El empate es muy bien visto por equipo que no quiere arriesgar y finaliza la idea con una pregunta: Arriesgar, es en todos los casos asumir riesgos negativos?

La toma de riesgos da para un chiste: ¿Por qué un economista se fracturo el cráneo al tirarse de cabeza a una piscina sin agua? Porque olvido hacer el ajuste estacional.

Algunos autores afirman que para la toma de decisiones, hay que poseer una personalidad propensa a la toma de riesgos radicales.

Otros afirman que es falso que los emprendedores exitosos sean personas que toman más riesgos que el promedio de la población.

Stephen Hawking sostuvo que “la inteligencia es la habilidad de adaptarse al cambio” aclarando que la medida de la inteligencia es la capacidad de cambiar.

Ahora bien, Mercedes Korin (periodista y consultora) nos dice que tiene la sensación  que la adaptación siempre llega tarde, como ocurre con el crecimiento de nuestros hijos.

Cuando uno siente que empieza a entender a lo hijos, ellos cambian de etapa y hay que volver a empezar.

Algo así sucede con la tecnología: cuando por fin sentimos que la tenemos más o menos clara, todo vuelve a cambiar.

Si nos definimos por los títulos universitarios, experiencia laboral, reconocimiento laboral estamos en un gran problema para adaptarnos a la era digital.

El pasado ya no puede ser usado como punto de referencia para construir el futuro, la respuesta que acumulamos como personas y como sociedad, van perdiendo validez, ya que no fue lo mismo que esté presente.

Según Héctor Cattena, ya  ha dejado de presentar su cv antes de una conferencia, porque siente que no agrega valor, también ha eliminado la palabra experiencia, porque la misma se remonta al pasado, muy distinto al presente.

Cuando uno se para en frente a una audiencia, debe saber que si pertenecen a la Generación X, solo el 30 % piensan que soy confiable. Y si son millenniales el nivel de confianza baja al 19%

Si alguien me pregunta cuál es su expertise? (hecho que casi nunca sucede), la respuesta seria, pertenezco a la generación perennials y que gracias a la Inteligencia Emocional (Daniel Goleman) estoy tratando de entender la realidad, relacionado y complementando las habilidades humanas con la nueva realidad.

Chip Conley cuenta, que al principio el no entendía nada sobre tecnología y hacia agua en las reuniones gerenciales y la primera táctica fue, al estar sentado junto a un joven experto en tecnología: Yo te ofreceré un poco de Inteligencia Emocional a cambio de tu inteligencia digital.

Todos estos aceleramientos de los cambios producen lo que se denomina ‘’sociedad del cansancio’’. Actualmente la agenda de los adultos en las empresas produce stress. Todos estamos más abrumados por la exigencia de los cambios, no nos alcanza el tiempo y siempre sentimos que debemos algo, cuenta Fabián Jalife.

El resultado es una persona agotada por el mandato de salir de la zona de confort y de tomar riesgos, tensionado por las exigencias.

Preguntas que se hace un abrumado:

Hasta cuando tengo que estar en forma?

Cuánto dinero más debo tener?

Esta mal pertenecer a una empresa que crece solo a un digito?

En los estudios, surge la idea de que nos sentimos desbordados, pero a su vez, lo necesitamos, dado que el estar siempre ocupado, tiene una alta consideración como prestigio social.

Si estoy ocupado, me quejo porque estoy agobiado y no tengo tiempo libre, pero a su vez, sino me llegan emails me agarra ansiedad.

Este deterioro que provoca la sociedad del cansancio, provoca que gerentes de la generación X han  empeorado en salud, en comparación con los colegas de hace diez años.

Hay una estigmatización muy negativa sobre lo viejo, sobre lo que no se reinventa o no se transforma, continua Jalife, esto genera una clase de ejecutivos superestresada, que tiene la presión de crecer a tasas exponenciales, sin perder lo acumulado hasta acá.

Porque la economía del cansancio se ensaña con particular crueldad con la generación X?

 Es porque allí están las mayores exigencias del management medio-alto y también se une  a las exigencias personales y familiares.

Pepe Sánchez (generación X, 42 anos) asimila los cuatro tiempos del baquet con la vida.

El primer cuarto es de experimentación

El segundo de plenitud y agresión

El tercero (acá esta la Generación X) de replanteos

Cuarto: “Vas a todo o nada”

El ida y vuelta que está habiendo en la agenda de innovación entre “cuerpo’’ y “mente” es cada vez más intenso y el concepto de zona es un lindo territorio de intersección.

La novedad más reciente es que distintas tecnologías exponenciales (Internet de las Cosas, Inteligencia artificial) combinadas con técnicas de meditación y de psicología conductual puede ayudar a entender las claves de estos momentos.

 

Este artículo fue escrito, basado en el libro Revolución Sénior de Sebastián Campanaro

 

Héctor Cattena

Artículos relacionados

Quiero recibir novedades

Quién está en línea

Hay 14 invitados y ningún miembro en línea

Danos un "Me gusta"

© 2014/2017 | Marketing a Campo de Hector Cattena. Implementado en Código abierto HTML5 | por Vissionflash