Bienvenido 2020

  • tamaño de fuente disminuir tamaño de fuente aumentar tamaño de fuente
  • Imprimir
  • Email

¿QUÉ VOY A HACER ESTE AÑO?

Hay una frase de Peter Drucker que es perfecta para este momento del año, en el que los balances y los planes parecen estar indicados por el calendario.

Qué voy a hacer este año?, se pregunta uno, nos preguntan otros...

Dice Drucker:

Las personas sobreestiman en gran medida lo que pueden hacer en un año, pero subestiman enormemente lo que pueden hacer en cinco años.

En primer lugar está señalada la costumbre que tenemos de plantearnos para un año objetivos imposibles (en el 2020 aprendo inglés, escribo la novela, aprendo a tocar el piano y tengo tres hijos).

Hay procesos que toman más de un año y al creer que pueden cumplirse en menos tiempo, estamos desde el principio condenándolos al fracaso.

Más interesante es el paso siguiente:

Si consideráramos para nuestros planes el período de cinco años, si dejáramos de tener al año como unidad de medida- podríamos, sí, plantearnos otro tipo de logros. En 5 años es perfectamente posible aprender a tocar bien un instrumento o dominar un idioma, y también desarrollarse como escritor y concretar unas cuantas obras (menores y mayores) o bien hacer una carrera universitaria o iniciar y consolidar un emprendimiento.

Lo mejor de todo, el factor práctico en todo esto:

Si pensamos en el plazo de 5 años se ponen a nuestro alcance logros que de otra forma sentimos inalcanzables.

La falta del uso del concepto de mediano plazo hace que ni lleguemos a plantearnos determinados objetivos, para nuestra experiencia, chocando contra la dificultad de querer volver reales los logros en un planteo sin tiempo.

Qué es lo que se necesita para concretar muchas de nuestras aspiraciones?

Tiempo y dedicación.

La frase de Drucker indica que el tiempo es la llave que hace posible la dedicación.

Hace casi un año que estudio y todavía no sé ingles! No, porque lleva más tiempo.

Parecemos dominados por una visión infantil según la cual la mera enunciación de un deseo u objetivo debería ir seguida de su concreción. Pues no: cada cosa que quieras tendrás que armarla, que lograrla, tejerla con un tiempo orgánico que no es el de la instantánea formulación de un deseo. Pedir un deseo, decirle a alguien que ojalá se le cumplan sus deseos, parece ocultar que los deseos no se cumplen solos.

Luchar? Bueno, sí, siempre algo de lucha hay, pero cuál es el verbo que falta? Trabajar Pero no hay que dejar de lado al momento de concebir la acción que concreta el deseo que una excitación nos conduce. Los buenos objetivos no se eligen, se sienten determinados en el cuerpo y se perciben en la excitación y el entusiasmo que despiertan. De allí proviene la fuerza que permite concretarlos.

Tal vez la palabra faltante sea entonces compromiso: tenes que comprometerte, para esa concreción, con el deseo y el entusiasmo implícito en ese proyecto. El período “en los próximos 5 años” relaja la tensión de tender a un logro inmediato (cosa irreal). Lo otro que hay que hacer es usar esos 5 años con una acción que no se abandone.

Y ahí sí, esfuerzo y trabajo.

ADELANTE 2020

Fuente: Alejandro Rozintchner (Peter Drucker) 

Adaptación: Héctor Cattena

Quiero recibir novedades

Quién está en línea

Hay 6 invitados y ningún miembro en línea

Danos un "Me gusta"

© 2014/2017 | Marketing a Campo de Hector Cattena. Implementado en Código abierto HTML5 | por Vissionflash